Año: 2017 | País: Reino Unido | Género: Symphonic Black Metal | Formato: CD | Sello: Nuclear Blast
Tarde pero Seguro. Ya han pasado varios meses desde su salida, pero es un disco que no podía no reseñar. Pero antes hagamos un poco de historia. CRADLE OF FILTH ha sido una banda extremadamente cambiante, tanto sea desde lo musical como desde su formación. Hoy en día lo único que nos queda de sus inicios es su vocalista, Dani Filth.
Si ponemos atención a su discografía, la agrupación de Ipswich editó 4 discos iniciales excelentes alcanzando su clímax creativo en el año 1998 con el aclamado “Cruelty and the Beast”. No obstante, su predecesor “Dusk and her embrace” y su sucesor “Midian” fueron placas inolvidables, dejando una marca a fuego en todos aquellos que los conocimos por esos años. Luego vino un período muy flojo de 5 años (2003 – 2008) donde no se sabe muy bien que fue lo que quisieron hacer y donde sus composiciones se tornaron mucho más modernosas y raras, alejándose de lo que predicaban para tratar de generar un producto que se acercara más a las nuevas tendencias dentro del metal extremo.
En el año 2008 editan “Godspeed on the Devil’s Thunder” augurando un retorno a la majestuosidad de antaño, pero que no se sostuvo con “Darkly, Darkly Venus Aversa” y mucho menos con “The Manticore and other Horrors” llevando a muchos a ubicar a CRADLE OF FILTH en el olvido o a dejar de seguirlos a futuro. Pues bien, para aquellos que desde entonces no han vuelto a escucharlos creo que deberían volver a hacerlo. En el 2013, ingresa a la banda la tecladista Lindsay Schoolcraft y dos años más tarde los guitarristas Marek Smerda y Richard Shaw devolviendo creatividad a la banda para editar un disco glorioso titulado “Hammer of the Witches”. Este álbum fue un gol al ángulo, uno de esos que nadie se esperaba y dejó a todos boquiabiertos. Un sonido rejuvenecido y moderno, pero que nos transportaba a los años gloriosos de la banda. Pero claro, esto ya lo habíamos vivido con “Godspeed…” y nadie apostaba a que pudieran mantener esa calidad compositiva y de sonido. Sin embargo, aquí estamos.
“Cryptoriana…” es el sucesor perfecto y nos trae nuevamente al COF que todos queremos; aquel que combina a la perfección elementos del black, goth, melodeath, thrash, power y heavy metal clásico logrando una propuesta casi única en su especie. Un disco donde el trabajo de las guitarras es majestuoso y por momentos recuerda a lo hecho por la dupla Pyres/Anstis a mediados de los 90.
La participación, mucho más activa de Lindsey en las voces complementando y amortiguando el descomunal despliegue vocal del enano maldito que, a pesar del paso del tiempo, sigue deslumbrando con sus chirridos espeluznantes y sus tenebrosos guturales. Sin embargo, como el tiempo deja sus huellas, y Dani lo sabe, se mueve mucho más en el rango de sus medios putrefactos y no tanto en los ensordecedores chirridos. De todas formas, los medios de Dani son una cosa sin igual y pocas veces he escuchado una voz tan asquerosamente perfecta para la música que acompañan.
Ni hablar del batero Marthus (que no tiene nada que envidiarle a Barker) que nos ofrece una oda a los blast beats todo a lo largo del trabajo sin titubear a la hora del cambio de ritmo para meter un doble bombo atronador o un mid tempo que nos baje un poco las revoluciones. Diez temas que promedian los siete minutos de duración (y uno no se da ni cuenta), componen este disco maravilloso inspirado, según el propio Dani, en el horror gótico victoriano lo cual puede ya vislumbrarse desde el arte de tapa a cargo de Artūrs Bērziņš quien también se encargó del video y la fotografía tanto de este trabajo como del anterior.
Si tuviese que destacar algún tema creo que “You Will Know The Lion By his Claw” es uno de los nominados, sobre todo por ese estribillo pegajoso con aires de postrock que me deja con ganas de escucharlo una y otra vez. El melancólico, oscuro, depresivo y thrashero “Wester Vespertine” también deslumbra por su complejidad compositiva y nos muestra la cara más agresiva de la banda en esta nueva faceta. El tema que da nombre al disco “The Seductiveness of decay” es otra canción para destacar, una de esas que engloban absolutamente todo lo que CRADLE OF FILTH es capaz de dar. Y finalmente, no puedo no mencionar el cierre con el cover de ANNIHILATOR “Alison Hell” en una versión simplemente brillante.
En síntesis, Cryptoriana es un disco fenomenal que confirma lo hecho en el anterior trabajo y renovando nuestra esperanza en el futuro de la banda. Si la formación no vuelve a cambiar y todo mantiene su curso, tenemos CRADLE OF FILTH para rato, y del bueno. Chucky, el enano maldito, está de vuelta y vino con todo.
Texto: Estanislao Aimar
| © METAL-DAZE.com | Todos los Derechos Reservados |