Año: 2023 | País: reino Unido | Género: Progressive Metal | Sello: InsideOut | Puntaje: ♠♠♠♠♠♠♠♠♠♠ (10/10)
Si hablamos del Rock-Metal Progresivo moderno y obviamos a una banda como HAKEN, estamos salteándonos una parte fundamental de la historia del género, que comenzó a cimentar al sexteto del sur de Inglaterra en el año 2004. A partir de aquel momento hasta el día de hoy, cada nuevo trabajo de estudio es distinto al anterior, manteniendo una línea progresiva, como concepto de libertad y creación. Desde el debut con “Aquiarius” (2010), comenzó un camino de exploración infinita que continúa hasta el presente posicionando y catalogando a la banda, como una suerte de hijos experimentales de PORCUPINE TREE. “The Mountain” (2013), fue un disco bisagra, que logró plasmar ciertas influencias en una unión vanguardista de los mejores rasgos de la agrupación, tanto en el audio, como en el sentido del género contemporáneo. Luego llegó “Affinity” (2016) que se destacó por aquella incursión en los sintetizadores más orientados a los años 80, generando un nuevo cambio en el paradigma musical del sexteto, mostrando una y otra vez que el camino está marcado paso a paso sin tabúes. La pasada y la nueva década comienza y termina respectivamente con ese maravilloso experimento conceptual que fue, “Vector” (2018) y “Virus” (2020), explotando aquel costado más pesado y plagado de condimentos cercanos a los emblemáticos DREAM THEATER, que calzan perfecto con la impronta de HAKEN establecida en cada trabajo.
Pero lo que hoy nos atañe es hablar de “FAUNA” su flamante trabajo de estudio lanzado el pasado 3 de Marzo.
Este disco tiene el concepto animal, en teoría y práctica lírica, atravesándolo de punta a punta, como una cuestión de comparativa constante, con la vida del ser humano. La premisa, al parecer, es que cada uno de los tracks estuviese relacionado directa o indirectamente con un animal, pero todo perfectamente conectado con el mundo humano. Quizás esta idea puede estar influenciada por el ya mencionado “The Mountain” (2013), que trata sobre los obstáculos con los que se debe lidiar al escalar una montaña. “Taurus” es un dignísimo comienzo para un álbum, que aunque parezca contradictorio respecto a los dichos de las primeras líneas que acabo de escribir, está más emparentado con la línea musical de “Vector” (2018), generando cierta confusión a primera escucha, respecto del rumbo que puede llegar a tener el disco. Cabe destacar que esta canción está inspirada en la migración de los Ñus (Antílopes africanos), generando una creativa cuestión de Cross Over, con la guerra de Rusia – Ucrania. “Nightingale” aparece en segundo lugar para desterrar todo lo dicho en el comienzo, magia polirrítmica en mid tempo, con un camino al trote pacifico, tratando de no elevar la epicidad hasta el maravilloso estribillo, en donde ROSS JENNINGS muestra que puede estar en el podio de los mejores vocalistas de la nueva generación progresiva. “The Alphabet Of Me”, los hermana quizás un poco más con LEPROUS, pero con un sentido propio y particular. Queda muy claro que la reincorporación, luego de 14 años de ausencia, de PETE JONES (Teclados), lo convierte en una parte fundamental del disco, colocando nuevamente a las teclas como protagonistas, algo que a decir verdad DIEGO TEJEIDA (Anterior tecladista) lamentablemente había perdido.
“Sempiternal Beings” vuelve a traer los conceptos de “Virus” y “Vector”, sobre todo en las guitarras, pero que logran una vuelta de rosca vanguardista debido al aporte de los teclados. La explosión en los estribillos, deja en claro que no restan recursos y que cada uno de los incorporados hasta ahora están presentes en la medida justa, convirtiendo cada track en un viaje sonoro sin retorno. “Beneath The White Rainbow” tiene la densidad justa para jugar a ese progresivo propio de HAKEN, sin cortes metálicos, pero caminando firme por un sin fin de matices celestiales que van y vienen, convirtiéndose en una batalla de momentos intrincados. “Island In The Clouds” invita a rebotar con su adictiva línea de bajo en el comienzo. Toda la obra está repleta de momentos que incitan a mover los pies al son del ritmo y a tratar de danzar, por así decirlo, con sus exquisitos y cantables machaques, que llevan la marca registrada de RICHARD HENSHALL y CHARLIE GRIFFITHS. Nos acercamos al trío del final y queda demostrado que hasta acá, “FAUNA”, representa musicalmente a HAKEN en su faceta más diversa. “Lovebite” circula alrededor de las relaciones fallidas, conectándolas con la historia de la araña viuda negra, como metáfora, en esta cuestión de que la hembra devora al macho luego del apareamiento. Musicalmente RICHARD y CHARLIE nos muestran sutilezas veloces repletas de sentimiento, con una fluidez tan mágica que emociona. “Elephants Never Forget” de 11 minutos de duración, es una de las composiciones más marcadas de matices como solo es capaz de generar una agrupación de estas características, incluso con maneras diversas de presentar las líneas vocales, algo poco frecuente en bandas al día de hoy. “Eyes of Ebony” da cierre al álbum a puro rock matemático y delicado. Una pieza musical con la intención de dejarnos hipnotizados con esa guitarra que se mueve en los primeros 2 minutos para llevarnos sin pensar por un camino adictivo instrumental, como estocada final.
Así, “FAUNA” es álbum repleto de momentos álgidos, de fusiones perfectas, y de sensaciones que se repiten como un mantra sinóptico, marcando a fuego los conceptos establecidos con convicción por el sexteto, que hoy es marca registrada, del Metal progresivo moderno .