El comienzo del nuevo milenio fue una época de grandes cambios y avances, no solo en el ámbito tecnológico, sino también en el musical. Surgieron nuevos géneros y subgéneros que desafiaron las convenciones establecidas y transformaron el panorama musical. Mientras la escuela de Gotemburgo ya generaba controversia con su enfoque comercial del death metal, otro movimiento ganaba terreno y apasionaba a los oyentes: el metalcore. Este género, en su esencia, fusiona elementos del metal extremo y el hardcore-punk, tomando una fuerte influencia de este último. Se caracteriza por la incorporación de breakdowns, riffs de guitarra pesados, bombos dobles y una alternancia entre voces guturales y melódicas.
El lanzamiento del álbum debut homónimo de KILLSWITCH ENGAGE y su sucesor Alive or Just Breathing marcó el surgimiento del metalcore melódico, que combinaba lo mejor de ambos mundos: la intensidad del death metal melódico y la accesibilidad del hardcore. Esta fusión dio lugar a bandas como ALL THAT REMAINS, TRIVIUM, AS I LAY DYING, ATREYU y BULLET FOR MY VALENTINE, que lograron una popularidad masiva y superaron con creces el éxito individual de cada uno de estos géneros. El metalcore melódico se convirtió en un fenómeno global, atrayendo a una amplia audiencia y generando un gran impacto en la escena musical. Su combinación de elementos extremos y melódicos, junto con letras emotivas y personales, resonó en los oyentes y les brindó una nueva forma de expresión.
A pesar de las críticas y debates que generó, el metalcore demostró su poder de permanencia y su capacidad para evolucionar. Con el tiempo, se diversificó y dio lugar a una variedad de subgéneros y estilos, manteniendo su esencia y su energía características. De estos estandartes musicales que mencioné anteriormente, rescatamos como el menos preponderante en el panorama latinoamericano, quizás, a ATREYU. Si bien es cierto que no ostentan el peso actual de sus contemporáneos en la escena nacional, es innegable que han sido una fuerza subyacente que, a lo largo de los años, ha contribuido a sostener el movimiento, no solo del metalcore como tal, sino del post hardcore, tras el lanzamiento de su disco Lead sails paper anchor en 2007. A pesar de no haber alcanzado el mismo nivel de reconocimiento masivo que algunos de sus pares, ATREYU ha mantenido una base de seguidores leales y apasionados que valoran su aporte a la escena musical. Su música, con su estilo característico y su energía inconfundible, ha resonado en aquellos que buscan algo más que lo que ofrecen las bandas más populares.
La banda se presentará por primera vez en Argentina el viernes 21 de marzo a partir de las 19hs en el Teatrito, con una formación renovada, con el vocalista Brandon Saller, los guitarristas Dan Jacobs y Travis Miguel, y el bajista y vocalista sucio Marc “Porter” McKnight, también en coros y voces guturales. Junto a ellos estarán como invitados los MELIAN.
Si no estás muy seguro de ir, acá te dejamos algunas de sus mejores canciones para que reflexiones y termines de convencerte.
5 – Blow
El cuarto álbum de ATREYU, Lead sails paper anchor, generó emociones encontradas y controversia debido a muchos factores. No solo porque fue su primer lanzamiento con Hollywood Records, sino porque también marcó un cambio significativo en su sonido. La banda se alejó de sus raíces metalcore y experimentó con un sonido más alternativo y post-hardcore, un género que estaba ganando popularidad en ese momento. Esta evolución fue evidente en canciones como Blow, que comienza como un himno más bien pop-punk de medio tiempo pero que incorpora elementos que generan un aumento en su intensidad, como un doble bombo galopante, sintetizadores y voces guturales, aunque estos no dominan la canción. Esta mezcla de elementos creó un sonido único que algunos fanáticos aceptaron, mientras que otros lo encontraron bastante polémico.
4 – Ex’s and oh’s
Es posible que uno de los mayores éxitos de la banda haya llegado con su tercer disco, A death-grip on yesterday, en 2006 que, paradójicamente, marcó una transición hacia una etapa más comercial. Con este álbum, la banda empezó a dejar atrás los rasgos del metalcore con riffs melodeath que los caracterizaban en sus inicios, optando por un sonido más accesible y menos elaborado. Este cambio estilístico, aunque exitoso en términos de popularidad, generó opiniones divididas entre los fanáticos. Algunos elogiaron la evolución musical y la capacidad de la banda para adaptarse a nuevos estilos, mientras que otros lamentaron la pérdida de la crudeza y la intensidad originales, argumentando que el sonido se había vuelto demasiado “comercial”. Esta canción, si bien mantiene un trabajo de violas y batería que se aferraba a un proto-IN FLAMES, con un tremendo solo en el segundo tercio de la canción, las voces comenzaban a volverse más gancheras y los guturales perdían terreno, aunque no tenemos dudas que el estribillo, cada vez que suena, es memorable.
3 – Becoming the bull
Del mismo modo que Blow, Becoming the bull del cuarto disco Lead Sails Paper Anchor, primer single de este álbum, mantiene una línea estilística similar, pero con una energía más intensa. Combina elementos melódicos y viscerales de forma equilibrada, lo que la convierte en un ejemplo paradigmático del sonido antiguo y moderno de ATREYU. Este nuevo sonido, caracterizado por una mezcla distintiva de melodía y fuerza, se convertiría en un sello distintivo de la banda tanto en este álbum como en su trabajo futuro, consolidando aún más su posición en la escena post-hardcore.
2 – Bleeding mascara
El primer disco de una banda funciona como un primer borrador que presenta su sonido e identidad musical inicial, estableciendo su estilo y dirección. Es con el segundo disco que generalmente se refinan y expanden las ideas originales, perfeccionando sonido y explorando nuevas direcciones creativas. Este fue precisamente el caso con el segundo álbum de la banda estadounidense, The Curse, lanzado en 2004. Este álbum no solo solidificó su presencia en la escena musical, sino que también los catapultó al éxito general con una colección de canciones que se convirtieron en grandes éxitos y favoritos de los fanáticos. Bleeding mascara es una de las canciones que demostró la capacidad de la banda para crear un sonido visceral y memorable, al tiempo que mostraba su crecimiento y madurez musical. El álbum consolidó su lugar en el panorama del metalcore, y sigue siendo un punto de quiebre en su discografía.
1 – Right side of the bed
Como ya mencionamos, The curse fue un punto de inflexión para ATREYU, donde consolidaron un sonido que, aunque se diluyó un poco con el paso del tiempo, dio origen a himnos imprescindibles en sus presentaciones en vivo. Canciones como Right side of the bed provocan una reacción eufórica en el público, que enloquece al escucharla. La combinación de riffs de guitarra pesados, voces desgarradoras y secciones musicales pesadas, crean una experiencia inolvidable para los fans, sobre todo en vivo. Además, Right side of the bed puede evocar una sensación de nostalgia en los fans más antiguos, que han seguido a ATREYU desde sus primeros días. En definitiva, esta canción es mucho más que una simple canción para los fans de ATREYU, es un himno, un recuerdo y una experiencia emocional que los conecta con la banda y con su propia pasión por la música.
📅 ATREYU en vivo.
🗓️ Fecha: Viernes 21 de marzo, 2025
📍 Lugar: El Teatrito