Con un disco de estudio (Acuario – 2017), uno en vivo (Acuario Live Set – 2018), un EP (Deshielo -2020) y varios singles; HABEAS PORNUS se ha convertido definitivamente en la posibilidad de que Hernán García (principal productor y compositor de la mayoría de los discos del proyecto en solitario de Claudio Oconnor) encuentre un espacio para seguir experimentando sonoridades. Con una banda consolidada (el guitarrista Miguel Senatore y el baterista Javier Kunusch se sumaron a García y al cantante Matías Díaz hace relativamente poco tiempo), Hernán se debate su tiempo entre el lanzamiento de singles para presentar nuevo material y su flamante proyecto que recupera los mejores momentos junto al actual cantante de MALÓN y HERMÉTICA pero sin su participación en escena.
En esta entrevista repasamos el pasado, presente y futuro de un músico que tiene mucho para decir.
HABEAS PORNUS pasó por un proceso de cambio de integrantes hasta lograr cierta estabilidad ¿Cómo te sentís hoy con la formación actual?
La formación de hoy, después de haber lanzado Deshielo, es la misma. Estoy contento de haber formado este grupo de músicos y de personas principalmente, porque siempre digo que hacer música no es solamente tocar. Está bueno estar con buena gente y me siento dichoso de que sean ellos, más allá de lo que cada uno tenga artísticamente para dar.
En una nota que te hicimos anteriormente planteabas que tu objetivo era tocar mucho, algo que finalmente no se fue dando con tanta asiduidad ¿Cuál es la razón que encontrás para que no se haya dado como lo imaginabas?
Es verdad lo que decís, pero siento que pudimos ir venciendo las dificultades que hacían que tengamos tantas fechas. A veces, uno no da con la gente que maneja la historia o no te sentís tan cómodo. Pueden pasar doscientas millones de cosas y después también pasa por uno, que tampoco logra enfocarse. Me parece que eso se fue ajustando con el tiempo, pero la realidad es que lleva bastante esfuerzo y es algo que tal vez la gente no percibe. Seguimos siendo un grupo nuevo, que ya tiene siete años, pero no deja de ser una banda a la que todavía están conociendo. Lo cierto es que, desde el año pasado, el grupo pudo empezar a tocar más y, sobre todo, se fue generando una suerte de tribu; con gente que empieza a venir seguido a los shows más allá de que toques un fin de semana y repitas el siguiente. Está bueno ver cómo se desarrollan esas cosas y cómo se van creando.
En el medio de esta búsqueda de crecer como banda, cayó la pandemia ¿Cómo viviste esa circunstancia?
En la pandemia seguí haciendo lo mismo que vengo haciendo siempre. Hubo que adaptarse a las circunstancias, pero seguí haciendo cosas. De hecho, hay un video clip nuestro de una canción que se llama ¿Cuál es? que fue hecho quince días después de que se hubiera frenado todo. Lo quisimos hacer igual, le buscamos la manera. El video muestra a cinco tipos, incluido el director también, encerrados. Quisimos demostrar que era muy injusto lo que estaba sucediendo.
Un poco esto implicó adaptarse a nuevos formatos, algo que hoy aparece claramente en la necesidad de sacar un single para promocionar tu música. El contexto, además, es un mercado que parece que no le presta atención al rock y al metal ¿Qué opinás del estado actual de la industria musical?
La industria, más allá de los géneros, está solamente en las cosas que ya funcionan previamente. A mí me entusiasma la relación que uno puede crear cuando una canción es acompañada con un videoclip. Las dos últimas canciones que sacamos, están fuera del disco, salieron como simples. En ese proceso me empezó a caer bien que, cada vez que uno muestre una canción nueva, esa canción esté acompañada audiovisualmente. Me parece que el video te da la posibilidad de poder mostrar visualmente lo que tiene que ver con la letra. Agrega un plus a lo de poder mostrar un mensaje.
¿Hay alguna posibilidad de que el metal y el rock retomen protagonismo en la industria?
Me parece que no hay una ciencia exacta y creo que nunca la hubo. Tal vez antes los márgenes eran un poco más grandes, entonces cualquiera (el amigo del director artístico de tal compañía al que no conocía nadie), sacaba un disco y vendía veinte mil. Hoy, ni una banda que tiene cuarenta años de trayectoria vende veinte mil discos. Son olas nuevas, la industria fue cambiando, todo fue cambiando. A mí me parece que lo más interesante es acomodarse en un contexto donde el rock, más que nunca, es música de culto, aunque sigue siendo amplio el público que lo escucha. Hay cosas extrañas que pasan como, por ejemplo, que a grupos nacionales que me parece son muy buenos les cueste mucho poder subsistir y de repente viene IRON MAIDEN y agote un estadio en un día con una entrada bastante más cara. Me parece que lo interesante no sé si está en preguntarse por qué pasa lo que pasa, lo más interesante es usar la energía para poder seguir haciendo cosas y para poder crecer.
¿Te parece que hay alguna posibilidad de que las cosas cambien?
Sinceramente, veo las mismas complicaciones que siempre. Uno de los problemas es que no vivimos en un país en el que se apoya a la cultura. Puedo ver una propaganda, puedo ver un panfleto, puedo ver un montón de cosas que me digan lo contrario: pero ya hace bastantes años que me dedico a esto y nunca me sentí apoyado. Creo que además, el tema es con el rock porque, tal vez, el folklore o el tango puedan contar con algo de apoyo. Siento que los gobiernos, si a alguien favorecieron fue a ellos y, en todo caso, después a la cumbia. En cuanto al rock, a alguno que otro le compraron un show y le pagaron el cachet, pero a nivel cultural nunca hubo un apoyo real.
Hace poquito anunciaste el lanzamiento de LA O VIVE SIEMPRE algo lógico porque fuiste el principal compositor de OCONNOR. ¿No hay chance de reunirse con Claudio?
Hoy no lo creo. Cuando uno enumera las cosas que tendrían que suceder para que eso pueda ser una realidad, se hace complicado pensarlo. Ya somos todos gente grande y nadie vive de peces de colores. Sobre todo con los tiempos de hoy. Si me preguntás, está más cerca de imposible que de sí, pero tampoco yo soy el dueño de la verdad.
Las redes sociales suelen ser crueles cuando se toman este tipo decisiones ¿Cómo percibiste la reacción de la gente?
Respecto al nombre, hace poco grabé un video explicando el por qué pero, sinceramente, no me parece tan importante. Me parece que lo relevante es otra cosa, por lo que me manejé de esa manera. Hoy me sigue pareciendo un poco lo mismo, lo único que vi, es que en algún momento a varios les hizo ruido. La verdad, me llamó la atención esa reacción porque nunca puse el peso del proyecto en esa cuestión. Es un sentimiento distinto al de uno, pero no critico la observación. Incluso, no descarto que capaz podría haber tenido otro nombre, al punto de que no tendría problema de que la gente elija el nombre. Fue lo que se me ocurrió y me pareció que estaba bien. No es mucho más que eso.
Teniendo en cuenta todo esto que hablamos ¿Qué proyectos tenés para este año?
Quiero que sea un año donde podamos seguir tocando mucho. El grupo tiene pendiente un montón de cosas en el interior. Eso es lo que más nos entusiasma aunque los costos sean complicados. Sobre todo, queremos hacer las cosas bien y dejar buena semilla a donde vayamos. Además, tenemos una canción nueva que es posible que editemos. Mientras, en los ensayos, estamos probando ideas para tocar nuestras canciones en otros formatos. Siempre estamos pensando cosas, no solo para no aburrirnos, sino para poder renovarnos. Nuestra filosofía como grupo es tratar de tener vigencia como artistas y, por sobre todo, animarnos a exponer lo que hacemos. Me parece que gran parte del secreto de que todo funcione tiene que ver con eso.
También podría interesarte
-
Entrevistamos a Ariel Bellizio de FUGHU: “Si te ponés firme, te hacés valer y le ponés ganas, todo se termina cumpliendo”
-
Entrevistamos a Eddie Walker de LETHAL: “Ser auténtico en la música, es lo que hace a un músico”
-
Entrevistamos a Emiliano Obregón de LÖRIHEN: “A los 40 tuve que dar un volantazo y cambiar mi vida”