ARCANE SANCTUARY en vivo en Buenos Aires: “Tres de un plan perfecto”

Fecha: Sábado 1 de junio de 2024 | Hora: 19.30 hs. | Ciudad: C.A.B.A. | Lugar: Club V | Bandas invitadas: ARTIFICIALLY ALIVE & PLEIA

Tres bandas se dieron cita en el renovado Club V. Con lo progresivo como punto en común, pero diferentes entre sí por varias razones, ya sea que hablemos de cada propuesta musical en particular o porque las bandas soportes vinieron del sur del GBA y la principal lo hizo desde Rosario, Santa Fe. O podemos nombrar también que tanto PLEIA como ARCANE SANCTUARY cuentan con un interesante recorrido hecho mientras que la que ofició de acto apertura tiene un presente curioso en ese aspecto, veamos un poco este último punto.

Hace más de un año que la guitarrista Micaela Figueiras tenía material como para un álbum y empezó a contactar músicos para plasmarlo. Le propuso a Antonella Barisani que se hiciera cargo de la voz para la grabación, puesto que luego pasó a ocupar en forma permanente. Intronaut se editó el 23 de enero de 2023, hace un poco más de un año. Luego se consolidó la formación definitiva hasta su primer show que fue… justamente esta fecha. El cuarteto se completa con Valentín Felenbok en bajo y Lautaro Ardiles en batería. El estilo de ARTIFICIALLY ALIVE es el de un metal progresivo muy bien trabajado, fuerte y técnico. Quizás algo cerca (no tanto tampoco) del metalcore que hacen los ucranianos JINJER, de quienes versionaron On the top.

Ya el arranque con Génesis sirvió para ir mostrando de a poco, qué se traían entre manos (y gargantas) en donde pasajes más calmos se alternaban con distorsiones, acordes disonantes, voces limpias y growling. Greyline y Utopía confirmaron el estilo, lo mismo que Escape, que contó con la vocalista Ayelén Cruceño para realizar un dueto bien armonizado junto a Antonella. Antes del cover mencionado, sonó la sorprendente y virulenta Irrational Desires para luego cerrar su presentación con el instrumental Quasar. Un primer show espectacular para una agrupación con mucho trabajo de laboratorio pero muy poco rodaje en vivo. Súper recomendables, agenden el nombre y no se pierdan sus próximos conciertos. No digan después que no les avisamos.

Los siguientes en subir al escenario fueron los ya conocidos PLEIA, de quienes hablamos cuando fueron soportes de CYNIC en Buenos Aires. La propuesta nos tomó de sorpresa, no por desconocerla, sino (por extraño que parezca) por ya haberla vivido antes. Es que ese metal/hard progresivo que hacen, donde aggiornan sus influencias setentosas, se manifiesta en composiciones imprevisibles, salvajes, con lugar para la improvisación, sin una estructura de canción fija, sino que su propuesta más bien parece un vendaval sonoro que invita a dejarse llevar… y que sea lo que tenga que ser. Tau I, Tau II, Enolas, Pleiah o Sentinel son buenos ejemplos de esto. Henry Luengo en sintetizador y voz, Nazareth Calmen en guitarra y algunas voces y el baterista Carlos Delmoral, proponen una música y espectáculo al cual es difícil encontrarle la vuelta para tratar de entenderlo en forma racional. Solo se trata de sentirlo y ver qué nos pasa. Completa el grupo el bajista Enrique Pérez de manera virtual, ya que, imposibilitado de seguir el trajín de la banda, ha dejado grabadas todas las pistas de bajo. Otra banda para agendar si es que han cometido el error de no haberla visto hasta ahora.

Y para cerrar la noche, ahora sí, hacían su entrada los ARCANE SANCTUARY. Luego de una intro vía pista de teclados, arrancaron con Between four walls. La gran y melódica voz de Juliana Penacino se hizo compatible con los diferentes momentos de la canción, le puso potencia a los pasajes más climáticos y melodía a los más fuertes. El metal sinfónico que ejecutan necesita que todos los músicos sean capaces de adaptarse a los vaivenes rítmicos, armónicos y melódicos del estilo y la ya mencionada Juliana, más el guitarrista Francisco Romero, el bajista Luciano Darío Vittone y el baterista Jeremías Gabriel Scoccimarro dieron cátedra de solidez y soltura para abordar una corriente musical que a veces puede pecar de cierta rigidez y de poner demasiado énfasis en la técnica, al punto de perder espontaneidad. No fue este el caso debido a que los momentos vertiginosos de He’s waiting, The host y Our truth mantuvieron al público presente en permanente agite (progresivo/sinfónico, desde ya) y con ganas de que la cosa no termine pronto. Lamentablemente, el set pautado no se podía extender mucho más por cuestiones del lugar. Esto hizo que las pequeñas demoras que se generaron desde la apertura de puertas devinieran en la baja de The way back del setlist, así que para esta altura solo restaban dos temas para finalizar la velada, que fueron The sailor of the rivers of blood y la adrenalínica y pesada Outside of me.

Y llegó el final de una jornada donde lo progresivo dijo presente. En diferentes facetas y con distintos protagonistas. Una noche para que la banda que daba su primer concierto demostrara que tiene con qué plantarse en la escena, para que los que vienen sonando revaliden sus laureles y para que aquellos que hacían su primera incursión por Buenos Aires dejaran todos los créditos abiertos.

La totalidad de las imágenes serán subidas a nuestra página de Facebook.