Año: 2022 | País: Alemania | Género: Thrash Metal | Sello: Nuclear Blast
Es claro que en los últimos 20 años (desde “Violent Revolution”) para acá, KREATOR ha aumentado su popularidad con una serie de decisiones que para algunos serán detestables y para otros una nueva manera de ingresar a su música y hacerla escuchable. Si pensamos lo que fue la mayor parte de la carrera de los Alemanes en los ochentas, es imposible dejar de lado que los Alemanes (juntos a sus coterráneos DESTRUCTION y SODOM) llevaron al thrash hacia una velocidad y una suciedad que ni sudamericanos, estadounidenses o europeos habían logrado hasta el momento. Lindando con la música extrema, la propuesta de KREATOR estaba lejos de ser accesible en discos como “Pleasure to Kill” o “Extreme Agression”, hasta que llegaron los noventas. En aquella época el histórico “Mille” Petrozza trató de incorporar nuevos sonidos sin mucha suerte y prácticamente quedó relegado hasta que como dijimos a principios de la nueva década (específicamente 2001) lanza “Violent Revolution”, un disco que los muestra bastante parecidos a lo que son ahora. Sin perder jamás su carácter extremo (la banda no es radial al estilo de METALLICA ni siquiera de ANTHRAX), los alemanes han sabido ubicarse en el fino límite que le permite conservar seguidores y sumar algunos nuevos con cada lanzamiento discográfico y con cada presentación en vivo.
Este disco, número 15 en su carrera tal vez es el que mejor define la variedad de sonidos que tiene una banda que siempre está dispuesta a experimentar pero habiendo aprendido la lección. En concreto, al menos en este disco “Hate Über Alles” (provocativamente titulado “El odio sobre todo” en alemán) hay espacio para la experimentación pero sin perder nunca la idea de lo que alguien espera al escuchar a los alemanes: una banda veloz, violenta, agresiva y con el punto justo de melodía, un poco como sabiendo que no existe más SLAYER (y que ahí hay un lugar que ocupar) pero al mismo tiempo entendiendo el público masivo de música pesada va más allá de los sonidos extremos.
La intro “Sergio Corbucci is Dead” (un curioso homenaje al director italiano creador del género “Spaguetti Western” que tiene una impronta a lo Ennio Morricone) desemboca en “Hate Über Alles” y “Killer Jesus” dos canciones que suenan veloces, poderosas y brutales con la idea de que la banda más allá de que haya ablandado su sonido (o lo haya hecho más melódico) puede sostener la velocidad que el fanático más old school espera principalmente porque tanto el juego de violas de Mile Petrozza y Sami Yli-Sirniö como el doble bombo Jürgen “Ventor” Reil tienen una tarea superlativa siempre y cuando te guste un thrash hiper rápido en el que se gritan cosas como (“El odio sobre todo/El odio es virus del mundo”).
Luego de estas dos canciones el disco comienza a construir un balance entre pesadez y velocidad que sobre el final tiene espacio para la dimensión más experimental. “Crush The Tyrants” es un medio tiempo con una serie de riff con mucha melodía (una de las grandes virtudes del disco) pero en sí la canción no aporta demasiado más allá de funcionar como contraste para la velocidad y agresividad de las dos primeras. En cambio las dos siguientes seguramente tendrán lugar en los próximos set list de los alemanes. “Strongest of the Strong” funciona como una especie de lado B de “Violent Revolution” con todo lo que ello implica por incluir velocidad, gancho, agresividad y un coro de estadios. “Become Immortal”, tal vez sea la canción más emblemática del disco, principalmente porque al ritmo del heavy metal y de las guitarras gemelas Mille Petrozza cuentas sus inicios (“1985, escucho la llamada / Nubes tóxicas cubren el sol/A la sombra del Muro de Berlín/Mi mente, vaga por los he perdido en el camino /¿Quién dio forma a lo que soy hoy? /Recuerda recuerda/ De dónde vienes/ Tu espíritu nunca se desvanece /Conviértete en inmortal”) demostrando toda la habilidad que ha logrado conquistar la banda en los últimos años para realizar canciones melódicas y gancheras, en lo que tal vez sea una de las mayores causas de crecimiento de popularidad.
“Conquer and Destroy” sigue con la onda de heavy metal, con guitarras gemelas e inicia la faceta experimental disco. La velocidad y ferocidad de la canción tiene contraste con un coro de voces femenina, algo que se potencia en “Midnight Sun”, donde la voz femenina de Sofia Portant tiene una crucial importancia en el segmento más pesado de tema, lo que en un principio parece algo chocante pero con el correr de las escuchas termina siendo aceptable.
La última parte del disco, parece intentar dejar en claro cierta idea circular que al menos desde lo musical propone el disco. Si dijimos que el disco empieza de manera veloz y rabiosa para luego bajar las revoluciones en plan heavy metal tradicional y más tarde experimentar con voces femeninas, “Demonic Future” vuelve a traer la violencia al igual que “Pride Before The Fall”. “Dying Planet” en cambio cierra el disco con una interesante apuesta entre la velocidad, la violencia y un segmento atmosférico y ominoso que también a su modo da cuenta del enojo y la agresividad que atraviesa el disco.
Con una gran tapa artista israelí Eliran Kantor (TESTAMENT, HELLOWEEN, HATEBREED y con el guitarrista norteamericano Arthur Rizk (guitarrista y productor del grupo ETERNAL CHAMPION, además de POWER TRIP y CAVALERA CONSPIRACY); que le da al disco un interesante sonido más allá que en las partes rápidas suene todo demasiado comprimido como en la mayoría de las producciones actuales, “Hate…” es un buen disco, meditado obsesivamente por una banda que hace rato juega en las ligas más importantes y que conoce a su público. KREATOR sigue levantando la bandera del odio y eso hoy por hoy los hace trascendentes.
Opina Iván Monastirsky, guitarrista y vocalista de AGAINST:
Arte: “El arte de tapa me parece buenísimo. Me encanta que mantengan el logo original y la mascota. Es bastante épico y tradicional. Hoy está bastante de moda hacer este tipo de tapas que parecen pintura y acá quedó genial”.
Sonido y ejecución: “El sonido del disco es buenísimo. Se entiende cada instrumento clarito aunque es un sonido actual, no vieja escuela”. “Mille viene cantando como lo hace últimamente. Más limpio, más entendible, no tan oscuro como antes. Canta más melódico. No tan cortante. Canta mejor y eso es un elogio porque mejoró con el tiempo más allá que a mí me guste la voz anterior”. “El trabajo de guitarras es bestial. Todos los temas tienen pasajes melódicos con mucha técnica, con armonía a dos guitarras. Solos pirotécnicos y respecto a la batería Ventor es el número uno”.
Canciones: “La intro tipo spaghetti western, es muy graciosa en el sentido de que no lo esperás en KREATOR”. “Escuché muchos riffs de metal clásico. Pasajes de heavy metal old school, bien tradicionales. Cosas bien cancioneras. Escucho mucho estribillo, buscando el hit constantemente y es lógico porque creo que la reinvención de KREATOR va para ese lado, algo que no me gusta tanto. Creo que ya lo hizo y le fue muy bien con discos anteriores”.
Conclusión: “Es un disco que tengo darle más oportunidades porque no logra convencerme como totalidad para lo que espero de la banda. Sin embargo técnicamente es impecable, está bien cantado, bien tocado, bien grabado, tiene una buena propuesta estética y visual, tiene hits, tiene todo lo que tiene que tener un disco. Tendría que escucharlo más para amigarme. Siempre me cuestan los discos nuevos.”