Año: 2024 | País: México | Género: Post Black Metal | Sello: Independiente | Lemmymómetro: ♠♠♠♠♠♠♠♠ (8/10)
NOSTALGHIA es un proyecto musical de la Ciudad de México, creado por el único miembro que es Alex Becerra, quien también está a cargo de la grabación y producción de los álbumes. A lo largo de su discografía, que a pesar de no superar los 5 años de existencia, ya es muy prolífica, NOSTALGHIA ha explorado diferentes enfoques de la música, incluyendo una variedad de géneros e instrumentación: desde el black metal atmosférico hasta el post-punk, el shoegaze, el dark folk, el rock progresivo e incluso el jazz. Durante el 2024, este proyecto mexicano ha lanzado tres discos de larga duración, pero el enfoque va para mi favorito, que es Terminal Lucidity. Este proyecto, en líneas generales, ofrece todos los ingredientes correctos para hacer un sólido disco de post metal, con un toque lo-fi prolijo e interesante para la cuestión. Por un lado, riffs de guitarra pesados y filosos, pero tenuemente apagados, un poco con aires de black metal con algún trémolo o riff característico, aunque más apretados y añadiendo constantemente capas in eternum. Por otro lado, teclados/sintetizadores apoyando a la cementación de esta atmósfera desoladora, un poco también traída del black metal y, finalmente, voces guturales que no terminan de ser gritos, pero tampoco melodías, con ocasionalmente algo de canto limpio intercalado aunque más presente para la ocasión.
Debo destacar fuertememente dos virtudes del presente disco. Una de ellas es la infinita capacidad de Alex Becerra para generar in crescendos y decrescendos en la animosidad de las canciones de manera totalmente orgánica y funcional, en general, con un fuerte énfasis en la atmósfera y el espacio, dando a los instrumentos lugar para respirar y desarrollarse, mientras relata mensajes centrados en las pérdidas, el luto, la depresión y la muerte, pero siempre de forma más bien poética y romántica. La otra, lo que más me cautivó sin lugar a dudas, es como en esta búsqueda melódica de la guitarra o el teclado, o ambos por momentos, surfeando por encima del caos organizado, aparece la reminiscencia a la vieja escuela de Gotemburgo. Sin apelar, claro, a la violencia y agresividad de la batería característica del melodeath, sino en su lugar encontrando ritmos más bien jazzísticos o poperos, pero que no le roban esencia ni pragmatismo a su música. Canciones como To see for oneself, la cadenciosa Wilted Petals Guide the Way o Stygian voyage tienen un corazón gótico y tétrico. La dulzura también dice presente, como en la apertura de Fade, en el instrumental Ecotone o en Life is wanted on the living, destacando también la participación de Frida Zavala en tres canciones, para terminar de matizar ese efecto emotivo que desborda en las canciones, así como también el solo de saxo fugaz pero notorio en la canción de apertura, a cargo de Valeria Dávila.
No solo Terminal Lucidity, que termina de redondear un gran lanzamiento en general, sino toda la discografía de NOSTALGHIA se desanda con su propia esencia, lúgubre y tenue, pero cargada de virtuosismo en cada paso que da y en cada instante que recorremos, generando un lindo momento para deleitar todas las capas sonoras propuestas. Sin dudas estaré más atento a estos tipos de movimientos musicales, ya que permiten una apertura y exploración musical que por lo menos para mí era totalmente desconocida.