Fecha: Jueves 25 de abril de 2024 | Lugar: Teatro Flores | Ciudad: C.A.B.A. | Hora: 20:00 hs. | Banda invitada: HUESO
De las bandas reconocidas como el BIG 4 (METALLICA, MEGADETH, SLAYER y ANTHRAX), es indudable que los últimos tienen un nivel de popularidad menor en cuanto a convocatoria; al punto de que, mientras los otros tocan en Argentina en lugares que tienen como mínimo diez mil personas de aforo, los de Nueva York logran llenar el Teatro Flores. Algunos pueden pensar que esto es una característica negativa, pero en el caso de los estadounidenses es un logro. A diferencia de otros shows masivos en donde el hype y la curiosidad hacen que la concurrencia aumente; aquí, sin exagerar, cada uno de los que estuvo en esta séptima visita a la Argentina; fue a ver una banda que seguramente está dentro de sus preferidas. Eso le dio a este show de Flores (un verdadero greatest hits de la era Belladona) un clima de efervescencia en donde el pogo y el moshpit fueron omnipresentes en cada una de las canciones de la noche, lo que, a su vez, generó un ida y vuelta entre banda y público de un nivel de efervescencia y entusiasmo mutuos que tal vez haya sido uno de los puntos más altos de la noche.
Los exponentes locales de HUESO fueron los encargados de abrir la noche con un breve, pero potente show de base hardcore como excusa para mostrar canciones donde lo thrashero y lo extremo rápidamente tomaron protagonismo. Sin lugar a dudas, su propuesta tiene el perfil de bandas como HATEBREED o BIOHAZARD con una amplitud que suma público de distintos subgéneros, llevándolo incluso a atmósferas bien veloces y extremas dando por resultado una propuesta que interpela desde distintos puntos de vista. Se fueron aplaudidos principalmente porque la energía del show estuvo a la altura de las circunstancias.
La reproducción de “The Number Of The Beast” de IRON MAIDEN con el telón cerrado (una especie de homenaje/cábala que la banda suele utilizar para comenzar los shows) dio inicio a una serie de intros (entre las que se incluyó “I Can’t Turn You Loose” de OTTIS REDDING en la versión de los BLUES BROTHERS) hasta que “Among the Living” inició el show con la banda a pleno, descargando toda su energía, mostrando como primera sensación una gran labor de Jonathan Donais a la hora de los solos. El guitarrista, último ingreso oficial al grupo, no se caracteriza por su simpatía y buena onda, por el contrario, su actitud estática y poco expresiva en el escenario da entender que lo suyo tiene que ver con lograr que la banda suene prolija desde las guitarras. En ese sentido, a lo largo de la noche su actitud estuvo a la altura; ejecutando cada solo y cada riff de manera efectiva sin ningún tipo de parafernalia.
La segunda canción de la noche “Caught in a Mosh”, presentada por Scott Ian, fue literal, principalmente porque empezó un pogo y un mosh furioso de un público con ganas de saltar y arrojarse por los aires. “Madhouse” presentada por Joey Belladona con el saludo protocolar “¿Cómo están Buenos Aires?”, fue otra verdadera fiesta de salto y pogo con un especial lucimiento de Belladona animándose a meter un partecita de “The Ripper” de JUDAS PRIEST al principio de la canción y luego alcanzando los agudos en una canción por demás exigente. En este sentido, la presencia de “Metal Thrashing Mad” lo mostró en un gran nivel vocal, algo no menor en canciones que tienen un alto grado de agresividad y violencia. La canción presentada por Ian como “una canción dedicada aquellos que son vieja escuela” tuvo aún más sentido con la presencia de Dan Lilker en reemplazo de Frank Bello quien no pudo encargarse del bajo durante la gira latinoamericana por problemas de salud. El actual líder de NUCLEAR ASSAULT fue parte de la banda del primer disco de la banda “Fistful of Metal” que este año cumple cuarenta años, por lo que elegirlo como reemplazante tuvo mucho sentido. En este punto, más allá de que su estancia en la banda sea ocasional, demostró todo su oficio y su presencia en el escenario al punto que no hubo demasiados argumentos para extrañar a Bello. Si bien su estilo es mucho más agresivo, el protagonismo que tuvo en escena sumó a la energía de la banda logrando, incluso, versiones más rápidas y violentas de las canciones originales, algo que justifica su aporte al cien por ciento.
La rockerísima “Efilnikufesin (N.F.L.)”, sostenida en un impecable juego de violas de Ian y Donais, tuvo una versión bien pesada y contundente en otro momento en que los circle pits y los coros de ida y vuelta entre público y banda tuvieron protagonismo. “Son espectaculares, ustedes son nuestras familias y están en nuestro corazón” dijo Scott Ian antes de una gran versión de “Keep It in the Family” que empezó con un riff ominoso en manos de Scott y que fue acelerando sostenida en el doble bombo de Charlie. Se podría decir que el actual baterista de PANTERA tuvo, a lo largo de la noche, la función de sostener las aceleraciones y rebajes de una banda que sabe, perfectamente, cómo manejar las temporalidades de su show. En canciones más densas y dramáticas como “In the end” (que incluyó un pequeño homenaje a “The sign Of The Southern Cross” de BLACK SABBATH de la era DIO) o en la electrizante “Medusa” su golpe fue definitorio a la hora de sostener la contundencia, la velocidad y la presencia de los riffs.
Otras de las cuestiones que volvió a confirmar esta nueva visita de ANTHRAX a la Argentina es que, a diferencia de otras bandas que proponen un permanente gesto adusto, los de New York son, por sobre todo, una banda divertida. En este aspecto Scott, además de ser una máquina de ejecutar buenos riffs y saltar para todos lados, es también el encargado de generar la comunicación con el público, transformándose en una especie de maestro de ceremonias que se caga de risa todo el tiempo. Por eso, antes de “I am the Law” arengó al público y terminó armando, junto a Benante, una especie de canción con el “Olé, olé ANTHRAX” en otro de los momentos que sirvió para demostrar la buena onda entre público y agrupación.“Yo debería estar abajo y ustedes estar acá arriba” dijo graciosamente antes de una gran versión de la canción, algo que aumentó la efervescencia que el set había logrado minutos antes con “Antisocial” (extendiendo el coro del tema a más no poder) y terminó por generar una verdadera fiesta con “Got the Time” y “A.I.R.”, las canciones elegidas antes de los bises en donde la velocidad y la buena onda tuvieron un protagonismo excluyente.
En este contexto, un show que pasó rapidísimo, tuvo en los bises una potente versión del “Indians” con Benante iniciando persuasivamente la canción y Belladona cantándola en un gran nivel, para cerrar un show feroz, frenético y sobre todo, divertido. En momentos como los que vivimos, irse a casa con una sonrisa no es poco. Eso con ANTHRAX está cien por cien garantizado.