Año: 2024 | País: Suecia | Género: Death Metal Melódico | Sello: Century Media Records | Lemmymómetro: ♠♠♠♠♠♠♠♠♠♠ (10/10)
La escuela de Gotemburgo, como se conoce al conjunto de bandas suecas que de alguna forma iniciaron el camino del death metal melódico, es algo que siempre me fascinará como concepto artístico y musical, ya que fue artífice de muchas de las grandes canciones de metalcore que prosiguieron y que me indujeron al mundo del metal. Sin embargo, superado el ímpetu juvenil, me supe dar el tiempo de escuchar estos monstruos y descubrí un mundo de texturas y sonidos que me explicaron el porqué de lo que ya había descubierto. Y no creo equivocarme al decir que, de las 4 bandas que forman esta escuela, DARK TRANQUILLITY ha sido quizás la más sólida y la que mejor ha envejecido a lo largo de estos años. Y si bien Endtime Signals, no alcanza las alturas de la gran obra maestra moderna que considero es Atoma, sí puedo afirmar que es un noble paso ascendente respecto a Moment. Los mismos condimentos principales que me encantan de los suecos están siempre presentes, pero con algunas pinceladas modernas, técnicas y progresivas que sumaron, además de que las letras del disco son memorables. Destaco también fuertemente la adición de Joakim Strandberg Nilsson, quien da un matiz más técnico a las canciones en la batería, y la brutal combinación entre los punteos de viola, al igual que los solos muy bien ejecutados y ubicados de parte de Johan Reinholdz. Todo esto, junto con los fríos teclados de Martin Brändström, terminan de cerrar una ambientación gótica y lúgubre, pero triunfante en cierto sentido; ¡banco fuerte esta nueva alineación!
Ya adentrándonos en el disco, este es una montaña rusa de sensaciones; es como una película que te ataca con varias secuencias en un lapso menor a una hora con muchos momentos para destacar. En la apertura nos encontramos con Shivers and Voids, que sin ser algo malo, es la canción estereotipo de DT, con esa mezcla patentada de riffs clásicos, tenues teclados y la ambivalente voz de Mikael Stanne que, esta vez, apela menos a los cánticos limpios. La canción que sigue es sencillamente brutal. Unforgivable también sigue la línea estilística usual, pero arranca fuerte y descaradamente, continua aún más veloz y trepidante, con un bestial solo y tenues matices de black metal, como sucede en algunas de las canciones de la era Fiction. Esto mismo sucederá más adelante en Drowned Out Voices, pero introduciendo algún que otro segmento más angelical y cristalino, si se quiere, para incorporar variedad. En otra paleta musical, pero igual de bestial está Enforced Perspective, con vetas más thrasheras y furtivas, en una colección de riffs y arreglos de guitarra bien ejecutados, y con menor presencia del teclado salvo en un segmento que destaca intencionalmente, que me deja un poco de gusto a los vikingos de AMON AMARTH u OPETH. Pero no todo es agresividad y violencia, ya que tenemos dos baladas muy contundentes. La primera de ellas, One of Us Is Gone, que ofrece un buen respiro después de la alzada agresividad que dejó el tema que la precedía, y que tiene un tono casi esperanzador, hasta que nos detenemos a escuchar y notamos la oscuridad de la letra: “So face the greatest emptiness / As it falls around you / On every step of the way”.
Hay algo que es real, y es que este disco no va a cautivar quizás a aquellos que ya no se han impresionado con la banda, pero para los nuevos oyentes y/o aquellos que quieran explorar algunos de los matices que ofrece DARK TRANQUILLITY, hay muchas cosas copadas acá. No está exento de defectos; quizás el mayor error es el orden de las canciones, ya que Wayward Blues y A Bleaker Sun son bastante flacas en favor de lo que veníamos oyendo, y False Reflection, la segunda balada del disco que, si bien es tremenda, emotiva y contundente (diría que un poco más que la anterior), no me da la sensación de que sea la elección para cerrar un disco. La versión deluxe del disco quizás enmienda un poco esta cuestión con la incursión de Zero Sum e In Failure, dos canciones que continúan con la exitosa fórmula de los suecos y que, sin sumar algo novedoso, le dan otro matiz al final del compacto. Como “experiencia”, podría decir que Endtime Signals se siente un poco irregular en su camino, pero sin dudas es una gran colección de canciones, muchas de ellas memorables, además que es uno de los mejores lanzamientos modernos de la banda y que me ha alegrado profundamente escuchar este 2024.