Entrevistamos a Ben Christo de THE SISTERS OF MERCY: “La actitud detrás de nuestra música es la actitud del heavy metal”


Desde su irrupción en los años 80, THE SISTERS OF MERCY se convirtió en uno de los pilares del rock gótico, moldeando un sonido y una estética que trascendieron modas y épocas. Con el enigmático Andrew Eldritch como figura central y arquitecto de su visión, la banda ha recorrido un camino tan influyente como misterioso. En esa travesía, uno de sus aliados más leales ha sido el guitarrista Ben Christo, quien desde mediados de los 2000 no solo aporta riffs y energía a los escenarios, sino que también actúa como ladero creativo y compañero de ruta de Eldritch. En esta entrevista exclusiva, Christo reflexiona sobre la dinámica con el líder, el peso de ser parte de una historia que marcó generaciones y los desafíos de mantener vivo un legado que se niega a perder relevancia. Porque, a pesar del paso del tiempo, cada presentación de THE SISTERS OF MERCY sigue siendo una invocación a esa oscuridad elegante que conquistó a varias generaciones y que aún hoy late con fuerza en cada acorde.

 

Empecemos con un poco de historia, teniendo en cuenta que estás por cumplir 20 años en la banda ¿Cómo fue tu primer contacto con Andrew y cuáles fueron tus primeras impresiones?

Mi primer contacto con él fue extraño porque no sabía que era él. Me llamó una persona misteriosa invitándome a una audición, pero no me dijo para qué banda era ni me quiso contar nada. Así que mi primera conexión fue bastante acorde a su misterio: no sabía quién era y no quería contar nada de sí mismo ni de la banda. Creo que eso fue muy apropiado.

¿Y cómo fue la primera vez que realmente lo conociste?

Cuando fui a la audición, aún no me habían dicho para qué audicionaba. Solo me dijeron que había una gira americana y necesitaban un nuevo guitarrista principal. Habían visto mi material y creían que podía servir. Me pidieron que tocara riffs de Jimi Hendrix. Yo estaba escéptico porque sonaban muy confiados, casi parecía una broma. Hablé con alguien más experimentado en la industria que me dijo que, a veces, las bandas establecidas no quieren que se sepa que buscan nuevo miembro porque esto podría afectar la venta de entradas si la gente piensa que la gira se cancela. Así que esta persona misteriosa quería ser cuidadosa con la información.

Como una especie de cita a ciegas…

Exacto. Fui a la audición sin saber nada. Entré a una habitación donde había tres hombres: uno con guitarra, otro con laptop, y otro sentado en un sofá con una cerveza y gafas oscuras. El que tenía la guitarra empezó a tocar riffs y me preguntó si podía tocarlos. Yo no leo música, pero soy bueno para aprender de oído y los toqué rápido. Entonces pensé: “Esto suena un poco a THE SISTERS OF MERCY“. Me di cuenta luego que tocaban canciones que no habían grabado todavía, pero el estilo tenía ese feeling propio de THE SISTERS OF MERCY, que ahora sé que viene de ciertas notas que usan en la escala de forma particular y que dan ese sonido característico. Entonces pensé: “Voy a tocar un riff famoso de THE SISTERS OF MERCY para ver si alguien reacciona“.  Lo toqué y el tipo con las gafas oscuras y la cerveza dijo: “Esa es una de nuestras canciones” Recuerdo mirar mis manos temblando, estaba nervioso porque no solo estaba con una banda que admiraba, sino que ahora podía ser parte de ella.

¡Qué increíble!

Sí, por suerte no me lo dijeron antes porque hubiera estado nervioso desde el principio, y tal vez no hubiera tocado tan bien.

Hasta ese momento, estabas tocando en una banda llamada AKO ¿Cuál era tu conexión con THE SISTERS OF MERCY en ese entonces?

Sí. Era una mezcla interesante de hardcore, rock, punk y metal. De adolescente había escuchado el álbum Vision Thing (1990), que me gustó. Luego trabajé en una tienda 7-Eleven; mi gerente era fan de THE SISTERS OF MERCY y me prestó el álbum First and Last and Always (1985), que me encantó. También tenía varios álbumes, hasta compré el Greatest Hits. Tenía incluso versiones regrabadas de Alice y Temple of Love. Me parecían una gran banda. Pasaba mucho tiempo en clubes bailando su música, especialmente porque cuando sonaba Temple of Love la pista se llenaba de mujeres atractivas. Como adolescente pensaba: “Esto es genial”. No era un fan obsesionado, solo me gustaba y tenía una camiseta de THE SISTERS OF MERCY. Estaban en mis treinta bandas favoritas, pero no eran mi favorita. Eso explica por qué, cuando entré a la sala, no reconocí a nadie. Es que a veces reconocemos a las personas por el contexto en que las vemos. Si ves a alguien fuera de contexto, puede que no lo reconozcas. Eso fue lo que pasó.

Con el tiempo, te involucraste en escribir y componer canciones nuevas. ¿Cómo es trabajar con Andrew, quien tiene fama de ser una persona difícil?

Lo que me gustó es que él es muy estricto sobre qué pasa y qué no, el filtro de calidad. Muchas cosas que hacíamos no pasaban. Era algo un poco desalentador. A veces pensabas: “Esto es genial,” y él decía: “No, no es lo suficientemente bueno, lo vamos a descartar.” En 2019 hubo un cambio en la formación de la banda y de repente hubo mucha productividad, desde 2019 hasta 2020, o sea, hasta este año en realidad. Salieron como 15 o 16 canciones nuevas. Aprendí mucho en ese tiempo sobre cómo hacer que una canción sea lo suficientemente buena para que la banda la acepte, al menos como idea. Tiene mucho que ver con ser efectivo y estratégico en el uso de las notas.

¿Cómo funciona esa dinámica?

Esta es una banda que puede construir toda una canción con solo tres o cuatro notas. No se trata de complicarla o hacerla muy técnica, sino de tres o cuatro notas fuertes, ya sea como melodía vocal, de guitarra o de teclado, y luego construir la canción alrededor de eso. Pensá en Dominion o Lucretia My Reflection, que están basadas en la misma progresión durante toda la canción. Pero la forma en que están escritas es efectiva y te atrapan. Fue difícil aprender ese estilo viniendo de un background de escribir canciones de metalcore, emo, rock de los 80s, muy detalladas, con muchas secciones, riffs complejos, especialmente en la batería con doble bombo y riffs complejos de metalcore. De repente era solo tocar tres notas durante cinco minutos. Pensaba: “¿Qué? No estoy haciendo nada.” Pero me di cuenta de que hacer algo, no necesariamente es complicarlo. Se trata de pararse en el escenario tocando esas tres notas, mirando al público, siendo casi estático, en vez de mirar siempre el mástil de la guitarra y hacer shredding. Esa fue una gran lección y me llevó un tiempo entender cómo escribir para esta banda. También me ayudó para otros proyectos: ahora intento escribir canciones con tres o cuatro notas que sean efectivas. En definitiva, se trata de cómo colocás las notas, el espacio entre ellas, cómo las tocás. Eso realmente mejoró mi forma de componer.

Aunque toquen canciones nuevas, THE SISTERS OF MERCY no ha sacado un álbum de estudio completo desde Vision Thing en 1990, ¿han hablado de eso con Andrew? ¿Por qué no han entrado al estudio otra vez?

Siempre me pareció un tema fascinante. Históricamente, la banda estuvo mucho en estudio entre 1985, 1987 y 1990, sacando álbumes prolíficos y exitosos. Luego, en 1993-1994, cuando se esperaba otro álbum, no salió nada. Me pregunto qué habría pasado si alguien hubiera podido ser una mosca en la pared en esos años y ver qué estaba pasando. Quizá el cambio natural en la escena musical tuvo efecto. En 1992-94 hubo un cambio grande, de un sonido producido y grandilocuente a algo más grunge e indie, que se volvió mainstream. THE SISTERS OF MERCY había triunfado con ese sonido grande y épico, que generó Andrew junto Jim Steinman (Ndr. Famoso productor y compositor colaborador creador de numerosos éxitos) en canciones como More o Lucretia My Reflection ¿Podrían haber hecho en 1994 algo con ese sonido grunge más crudo? No sé. Quizá todos esos factores se combinaron para retrasar el siguiente paso durante 30 años.

Ahora vivimos una época de nostalgia, donde los discos en vinilo vuelven y los adolescentes vuelven a usar iPods o Walkmans para revivir esa música. ¿Es un buen momento para que la banda traiga material nuevo?

Sí, lo bueno es que muchas bandas necesitan grabar discos para que la gente vaya a verlas en vivo, porque sino no conocen sus canciones. Pero THE SISTERS OF MERCY ya tiene un catálogo enorme y de alta calidad. La gente sigue viniendo 35 años después de la última vez que sacaron algo en vinilo. Somos afortunados porque podemos componer canciones y tocarlas en vivo sin tener que pasar por el proceso extenuante y emocionalmente agotador de grabar un disco completo. Grabar un disco implica preproducción, producción, discusiones, peleas y política dentro de la banda, y luego trabajar con terceros como videógrafos, fotógrafos, periodistas, prensa, discográfica, y hacer muchos compromisos sobre las canciones que uno creó y le gustan. Eso es mucho estrés, especialmente para una banda del nivel de THE SISTERS OF MERCY. Por eso somos muy afortunados de poder componer, tocar en vivo y que la gente escuche las canciones en YouTube sin ese lastre de lanzar un disco, que suele llevar al menos un año de trabajo duro.

Me contabas antes que tuviste que cambiar tu forma de pensar para adaptar tu música a este estilo simple de tres o cuatro notas. ¿Intentás mantener las versiones originales o estas notas te dan espacio para agregar tu toque personal como músico?

Cuando empecé en la banda, agregaba demasiadas cosas, llenaba los espacios. Supongo que era la exuberancia y emoción de la juventud, de “puedo tocar todo el tiempo”. Ahora creo que es importante para la canción y el público que suenen como las canciones que les gustan y con las que crecieron, ya sea que las hayan descubierto hace poco o hace 30 años. Por eso dedicamos mucho tiempo a recrear los sonidos y tonos de guitarra de los riffs clásicos. Por ejemplo, en Dominion, con tres o cuatro notas, pasamos mucho tiempo con Chris Catalyst (Ndr. Guitarrista y operador de Dr. Avalanche). Es increíble con los sonidos de guitarra, para clavar esos tonos exactos y que suene como en el disco, para que la gente lo reconozca. Al mismo tiempo, hacemos que las canciones suenen un poco más pesadas y emocionantes, pero sin cambiar la tonalidad ni los elementos esenciales que las hacen lo que son.

Ya que lo mencionaste, uno de los elementos clave del sonido de la banda es la caja de sonido que llaman Dr. Avalanche. Teniendo en cuenta que la  tecnología de esa caja de ritmos ha evolucionado mucho. ¿Cómo interactúas con ella? ¿Es como otro miembro de la banda para vos?

El que opera a Dr. Avalanche es “la enfermera del doctor“, ¿no? O tal vez el Doctor Avalanche opera a la persona y esa persona es la enfermera. Esa enfermera han sido varios músicos y técnicos fantásticos a lo largo de los años. He interactuado con Dr. Avalanche en el sentido de que he programado cosas para él, pero nunca directamente en la máquina. Uso otras computadoras y luego transporto el material al doctor. Nunca he estado en el laboratorio propiamente dicho, pero he trabajado en otros laboratorios y les he enviado el material.

Somos una revista o sitio dedicado mayormente al heavy metal y THE SISTERS OF MERCY tiene fuertes lazos con el género. Bandas como PARADISE LOST, MY DYING BRIDE, TIAMAT entre otras, han sacado álbumes claramente influenciados por THE SISTERS OF MERCY. ¿Por qué creés que los músicos de heavy metal se sienten tan atraídos por esa influencia?

Es una pregunta muy interesante, porque fuera del álbum Vision Thing, no hay muchas guitarras distorsionadas pesadas en el trabajo grabado de THE SISTERS OF MERCY. Incluso canciones como Alice en la versión de 1993, que uno piensa que son pesadas, tienen muy poca guitarra rítmica pesada. Es más la guitarra principal y un bajo con mucho groove. Creo que es porque la actitud detrás de nuestra música es la actitud del heavy metal, aunque las guitarras pesadas no siempre estén presentes. Las canciones están fuera del mainstream, son evocativas, provocativas y enigmáticas. La voz de Andrew es agresiva, cruel, tiene esa voz de heavy metal, aunque no grita ni hace growls. Canta de una forma sardónica, casi como un villano de película. Por eso creo que a la gente del heavy metal le gusta.

¿Sentiste la necesidad de tocar o escribir música pesada una vez que entraste a THE SISTERS OF MERCY? ¿Nunca tuviste ganas de volver a una banda de heavy metal?

En otros proyectos paralelos esa necesidad se cumplió. Estuve en una banda llamada NIGHT BY NIGHT con riffs pesados, y en mi banda más reciente, DIAMOND BLACK, también hay riffs pesados. Cuando empecé en THE SISTERS OF MERCY noté que algunas canciones tenían un toque más de rock pesado que las versiones de estudio. Así que esa necesidad se cumplió dentro de la banda

Me da la sensación que el público de la banda ha cambiado con el tiempo. Hay al menos tres generaciones desde la formación hasta hoy. ¿Quiénes son los que llevan la posta ahora? ¿Qué ves o sentís desde el escenario?

Es increíble. Como decís, tres generaciones. En los últimos años, en las primeras filas hay mucha gente de 18 a 25 años. También hay personas de 40, 50 y hasta 60 años, lo que es increíble, con un rango de edad de 18 a más de 60. Además hay mucha variedad de subgéneros: metaleros, rockeros, punks, góticos, emos, y también personas que parecen simples trabajadores, como un hombre que trabaja en un concesionario y que de joven era fan, ahora creció pero sigue viniendo. Es una amplia sección transversal de géneros. Creo que lo que une a todos es que cualquiera que viene al show, en algún momento se sintió excluido del mainstream y encontró en el ser fan de THE SISTERS OF MERCY un espacio seguro para sentirse conectado con otros que también están fuera del mainstream.

¿Qué esperás de este show en Argentina? ¿Esperás algo especial o lo mismo que de otros shows?

Creo que, como estuvimos mucho tiempo sin tocar (el último show fue en 2011 en el Teatro Flores), algunos fans llevan 14 años esperando y otros nunca vieron la banda en vivo. Eso es muy emocionante. Creo que habrá mucha exuberancia, pasión y emoción. Estoy muy ansioso por ofrecer algo que iguale ese nivel de entusiasmo de los fans.

Entrevista: Carlos Noro y Estanislao Aimar
Foto de portada: Prensa
Agradecemos a Marcela Scorca de Icarus Music por la gestión de la entrevista.
| Metal-Daze Webzine | Marca Registrada | Todos los Derechos Reservados © |

0 0 votes
Puntaje del Artículo
guest
0 Comentarios
Más recientes
Más antiguos Más votados
Inline Feedbacks
View all comments
Translate »
error: ¡CONTENIDO PROTEGIDO!
0
Nos encantaría conocer tu opinión, comentá!x