Los reyes del gótico
LACRIMOSA es sin duda uno de los exponentes más grandes del gótico. Una banda que se fundó allá por 1990 de la mano de Tilo Wolf, cantante y compositor multi instrumentista. Años después se uniría a la causa la finlandesa Anne Marjanna Nurmi, cantante y tecladista, para terminar de armar el rompecabezas que llevó a la banda a girar por todo el mundo. Sus paseos por el neoclásico, sinfónico, industrial, y darkwave, hacen de LACRIMOSA una banda irresistible para ver en vivo. El 17 de Diciembre nos visitaron en el marco del “Testimonium Tour”, gira en la que presentaron su último trabajo de estudio, pero con una particularidad, esta sería la última fecha. Groove fue el lugar elegido, y el show sirvió para sumarse al festejo de los 20 años de ICARUS MUSIC.
La velada de entrada fue especial, podíamos observar al público bien lookeado, que se iba sumando a medida que transcurrían las horas. INAZULINA, EVA y BLOODPARADE fueron los encargados de comenzar a macerar la noche, mientras DJ Set Hadrian Gothic BA se dedicó, entre bandas, a musicalizar la fecha. Se acercaba la hora, algunos rezagados ingresaban apurados y se escabullían entre el tumulto de un Groove colmado de gente.
Silencio en la sala, la gente completamente callada. Siendo las 21 hs., comenzamos a escuchar “Lacrimosa Theme”, una intro que nos fue poniendo en clima. Acto seguido se abriría el telón, y allí estaba Tilo, fondo obscuro y todas las luces apuntando hacia él. Su presencia arriba del escenario, con voz grave, entonando las estrofas de “Wenn unsere Helden sterben”, inundaron todo el recinto. Melancolía, densidad, obscuridad, esta es una banda que sabe perfectamente como manejar los climas de forma magistral.
Por momentos pudimos ver a Tilo de espaldas al público, realizando ademanes de marioneta, decorando las canciones con su actuación. Antes de comenzar con “Zwischen allen Stühlen” la banda hizo cantar al público a capella, ningún presente se privó de hacerlo, a tal punto que entre integrantes de la banda se miraban asombrados. Haciendo reverencias y tocándose el corazón en agradecimiento a todos los presentes.
Momento de cambios… Tilo se dirigió al teclado y Anne tomó la posta en las voces, de esta forma nos regalaban “Not Every Pain Hurts”. Impresionante trabajo en vivo de Anne, desplazándose por todo el escenario y deleitándonos con su amplio registro vocal. Ya estábamos a mitad de setlist, la noche estaba encendida, y todos en sintonía con la banda, y sobre todo con Tilo, quién nunca dejó de expresarse corporalmente, de acuerdo a la temática de cada canción, hasta arrastrarse por el piso, y acercarse al público para hacerlo cantar.
Se acercaba el final, 22:30 hs la banda se retiraba del escenario, mientras los presentes entonaban el clásico “Olé, olé, olé, oleeee”. Las luces se mantenían encendidas y la gente no paraba de gritar. Minutos después la banda volvía a salir al escenario. Era momento de los bises, “Stolzes Herz” fue el primero, Tilo y Anne estaban solos arriba del escenario, y a medida que la canción crecía se iban sumando poco a poco integrantes de la banda.
La noche volvía a estallar, cuando lanzaron arriba del escenario una bandera Argentina. Tilo la hizo flamear y luego se la colocó en su cinturón para cantar con ella el resto del show. El cierre definitivo llegaría con “Durch Nacht und Flut”, bien elegida por cierto, por sus partes en castellano. Reverencias, sonrisas y saludos de todos los integrantes de la banda, púas y baquetas que volaban hacia el público. Anne agradecía y deseaba Feliz Navidad para todos, la velada había llegado a su fin. Inmenso show de LACRIMOSA, quienes durante dos horas nos pasearon por toda su carrera.
Nota: Se escucho por ahí que la banda realizó la prueba de sonido con media canción simplemente. Me parece que no hace falta agregar mucho más.
Texto: Diego Villares
Fotografía: Marina Vilela
Agradecemos a Marcela Scorca vía Icarus Music Argentina por la acreditación al evento.
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