Fecha: Sábado 14 de septiembre de 2024 | Hora: 00:00 | Lugar: El Sótano Pub | Ciudad y provincia: Comodoro Rivadavia, Chubut | Banda invitada: LAICO
LETHAL volvió a presentarse en Comodoro Rivadavia tras poco más de un año. En esta oportunidad, en el marco del “Somos Thrash Tour”, en El Sótano Pub, con el power trío local LAICO como invitado que, con su agresivo thrash-groove-hardcore, dejó al escenario y al público en llamas, durante una madrugada de domingo donde reinó el pogo y una fluida comunión metalera.
Tito García en la voz, Eddie Walker en el bajo, Ramón López en la guitarra y Sergio Gómez en la batería, guiaron a los comandos letales por una ruta plagada de clásicos, sumados a la frescura de los temas de su más reciente álbum, Somos Thrash, a lo largo de una hora y media.
Pero la primera piña la metió LAICO, con una propuesta al hueso, dotada de filosos riffs, breakdowns marcadísimos, golpes de batería asesinos y una base para construir un edificio. La banda compuesta por Leo Cardoso en voz y bajo, Nacho Carzoglio en guitarra y el Chueco Cárcamo en batería, volvió a las tablas después de un largo tiempo (grabación de LP mediante) y la descosió.
Fueron 40 minutos frenéticos en los que desfilaron Doomslayer, OxCxVx, Mártires de hoy, Laico, El Observador, Creer es crear, Suicidon’T, Los que llevan el control, La matriz, Oppenheimer, Del sur, Duda y Mi venganza. Este último tema llevó a su guitarrista a bajar y compartir sus riffs entre el público, que formó una ronda a puro cabeceo.
Fue el final de una gran antesala para lo que se venía. Volvieron a sonar los vinilos de Jere Casares, quien acompañó la velada pinchando discos y a la media hora apareció LETHAL en escena. Desde el fondo de El Sótano, los guerreros en la noche fueron acercándose a la línea de fuego, para plantar bandera al son de Somos Thrash, del álbum homónimo, del cual también sonaron Piel de cordero y Armaggedon, completando así el tridente del arranque.
A la bienvenida de Tito, ante un público que aún estaba entrando en calor y un sonido que empezaba a acomodarse, le siguieron Estalla Buenos Aires (Efecto Tequila, 1996), Inyección Lethal y Busca tu camino (ambos de Inyección Lethal, 2011).
Ya con la valla agarrotada, el recinto entró en estado de ebullición con dos clasicazos de Maza (1993): Basura y Resaca. Ese fue el punto de inflexión, la definitiva puesta a punto para transitar el resto de la madrugada a plena marcha.
En ese marco, fueron más que bienvenidos otros dos temas del trabajo lanzado este año, Una razón para volver y El problemático Sr. No, para equilibrar la balanza entre las canciones más emblemáticas y las nuevas, junto a la no tan nueva Hasta la muerte, del homónimo publicado en 2015.
En la recta final, la entrega era total, tanto arriba como abajo del escenario, y la gratitud también era recíproca. “Con todos los quilombos que tenemos, nosotros seguimos girando igual”, vociferó Tito García, antes de darle paso a las palabras del hombre de las cuatro cuerdas.
“Gracias a la energía de esta gente, vamos a perdurar mucho más en el tiempo. Gracias por la energía que nos dan, porque nos dan más vitalidad”, remarcó Eddie Walker, para luego anunciar el próximo tema en tono humorístico, con la complicidad de Tito y los presentes. “Pero sabemos que después de la gira, en algún momento… vamos… a… ¡morir!”, fue el pie para que arremeta V.A.M., de Maza, el disco más revisitado, del cual guardaron dos gemas para el final.
Rompiendo el silencio (Bienvenidos a mi reino, 1990) y Warriors in the night (Warriors, 1992) irrumpieron como titanes inclaudicables, allanando el último tramo para una despedida que se llevó todo puesto, con Mike Tyson y Maza.
“¡Larga vida al metal, carajo!”, fue la arenga final de Tito, ante los puños en alto que denotaban un sentimiento de orgullo y victoria, porque el metal ganó una vez más. Así, luego de una extensa espera sabatina, todo terminó en una fiesta dominguera que gozó del fervor de los fieles seguidores (los de antaño y los que se van sumando a través del tiempo), contagiados por lo que brinda desde las tablas una banda que nunca defrauda.