Tony Moore músico, compositor y ex integrante de los primerísimos días de IRON MAIDEN, ha tenido una carrera fascinante y multifacética, explorando distintos géneros y dejando su huella en la industria musical. Desde sus primeros días en IRON MAIDEN, cuando la banda aún estaba en su fase inicial, hasta su trabajo con grupos como CUTTING CREW, su trayectoria ha estado marcada por la reinvención y la búsqueda constante de nuevas formas de expresión artística.
En esta entrevista, Moore comparte recuerdos de su paso por IRON MAIDEN, reflexiona sobre la evolución de su sonido y habla sobre los desafíos personales y artísticos que enfrentó al crear su álbum conceptual Awake. Además, nos cuenta cómo ha sido la recepción de su música en distintos rincones del mundo, su amistad con Steve Harris, y cómo ha logrado mantenerse fiel a su esencia mientras sigue innovando en su carrera.
Mirando atrás en tu carrera, ¿Cómo describirías el impacto de tu tiempo en IRON MAIDEN en tu crecimiento personal y musical, considerando que estuviste en la banda durante sus primeros días y por un tiempo relativamente corto?
¡Esa es una gran pregunta para empezar! El impacto fue enorme. Crecí en Bristol, una ciudad en el oeste del Reino Unido (aproximadamente a dos horas de Londres). Unirme a IRON MAIDEN fue mi excusa para mudarme a Londres, donde he vivido desde entonces. Cuando llegué por primera vez, me quedé con Steve Harris y su abuela hasta que encontré mi propio lugar para vivir. Pasábamos muchas noches escuchando nuestros álbumes favoritos y haciendo planes para el futuro de IRON MAIDEN. Él tenía una visión muy clara de lo que quería que fuera la banda, y hoy en día, IRON MAIDEN es exactamente eso que soñó.
Steve Harris mencionó que si hubieras tocado la guitarra entonces como lo haces ahora, podrías haber permanecido en IRON MAIDEN. ¿Cómo te hace sentir ese comentario y qué opinas sobre las decisiones que tomaste en aquellos primeros años?
Me siento increíblemente halagado de que Steve haya dicho algo tan poderoso y elogioso. Ciertamente, no era un gran guitarrista en aquellos primeros días (en 1977, era el tecladista de MAIDEN). Aunque siempre he tocado la guitarra, solo en los últimos diez años la he abrazado por completo. Cuando empecé a tocar Awake en vivo, algunos amigos que nunca me habían visto tocar la guitarra líder quedaron sorprendidos. En la vida y en la música, siempre sigo mi corazón. Dejé MAIDEN después de un concierto en The Bridgehouse, un local en el este de Londres. En ese momento, sentí que los teclados no encajaban. Siempre he estado orgulloso de mi pequeño papel en su gran viaje y he asistido a sus conciertos siempre que he podido. Steve y yo nos volvimos a conectar hace solo cinco o seis años, pero fue como si el tiempo no hubiera pasado. Nuestra amistad simplemente continuó como si siguiéramos en 1977. Me siento afortunado de tenerlo como amigo: es una persona humilde, increíblemente solidaria y una de las mejores personas que podrías conocer.
Después de compartir el escenario con Steve Harris en la gira de BRITISH LION, ¿Cómo comparás la camaradería que tenías con él en los primeros días de IRON MAIDEN con la relación que tienen hoy, tanto profesional como personalmente?
Antes que nada, me siento honrado y conmovido de tocar en el mismo escenario que Steve después de tantos años. Steve es un gran apoyo para todo lo que hago y ama Awake tanto que intenta ver mi show en la gira siempre que encuentra un lugar cómodo y tranquilo para hacerlo (a menudo al costado del escenario). Nos divertimos mucho en la gira, nos reímos mucho y pasamos momentos increíbles juntos.
¿Cómo fue la recepción del público sudamericano durante la gira de BRITISH LION? ¿Qué hizo que su energía y pasión se destacaran en comparación con otras partes del mundo?
Sin duda, el público sudamericano está en otro nivel. La recepción que tuve fue increíble y, en particular, Argentina me dejó sin palabras. La gente fue tan apasionada y expresiva que hicieron que la noche fuera inolvidable. No puedo esperar para volver.
Tus shows en vivo se han convertido en una experiencia inmersiva. ¿Qué te inspiró a desarrollar este concepto y cómo sientes que impacta en la conexión del público con tu música?
Desde que estaba escribiendo el álbum, supe que tenía que ser un espectáculo en vivo muy especial. Así que empecé a desarrollar videos, imágenes y material visual para cada canción mientras creaba la música. Con el tiempo, he editado y modificado muchos de los videos. Como Awake es un show en solitario, sentí que tener algo visualmente interesante, inesperado e inspirador agregaría un valor extra a la presentación, permitiendo al público involucrarse más en la experiencia.
Tu música a menudo tiene elementos que recuerdan a bandas como QUEEN y PINK FLOYD. ¿Cómo describirías la influencia de estos legendarios grupos en tu sonido y cómo incorporas su esencia mientras mantienes tu propia identidad?
Otra gran pregunta. Crecí viendo y escuchando bandas como QUEEN, PINK FLOYD, JETHRO TULL, GENESIS en sus primeros años, ALICE COOPER y muchas más. La década de 1970 fue un período de gran inspiración y, junto con THE BEATLES, esas bandas influyeron profundamente en mi composición y producción. Su música me hacía “sentir” cosas cuando asistía a sus conciertos o escuchaba sus álbumes. Al crear Awake y diseñar el show en vivo, quería que la gente que escuchara mi música sintiera lo mismo. Sin embargo, filtro estas influencias a través de mi propio estilo, experiencias y “voz”, porque hay mucho que quiero expresar y compartir a través de mi música.
¿Cómo surgieron las primeras ideas para Awake y qué te llevó a crear un álbum conceptual tan personal que aborda temas universales como la pandemia y el cuidado de tu madre?
Awake comenzó como una pieza instrumental que compartí con algunos amigos. Recibí muchos comentarios positivos, algunos dijeron que podrían imaginarla en una especie de película. Animado por esas reacciones, seguí trabajando en la canción y agregué letra después de unos cuatro minutos. Cuando la terminé, hice un Facebook Live tocando la guitarra y cantando con la pista de fondo. Recibí tantos mensajes maravillosos que me di cuenta de que Awake podía ser la canción de apertura de un álbum que aún no había grabado. Decidí hacer un álbum conceptual, como los que me habían inspirado de niño. Me puse un plazo de dos meses para escribir y grabarlo, sin reglas ni límites. Quise capturar libremente mis experiencias, pensamientos y emociones en un mundo que se volvía caótico en 2020. Con el tiempo, descubrí que muchas de mis letras transmiten mensajes universales. Después de los conciertos, muchas personas se me acercan para contarme historias similares a las que describo, especialmente sobre el cuidado de un ser querido con demencia.
En el proceso de creación de Awake, ¿Qué parte de la producción te desafió más artística y personalmente, y cómo lograste transmitir una historia tan íntima de una manera accesible para el público?
Para ser honesto, la canción más difícil de escribir y grabar fue Remember Me. Cuando tenía 13 años, soñaba con tener éxito en la música y estar al nivel de mis héroes. Aunque he tenido una vida increíble y no me arrepiento de nada, cuando hice Awake en plena pandemia, con la incertidumbre de si volveríamos a dar conciertos, reflexioné sobre cómo todavía NO había alcanzado mi sueño. Fue una verdad muy difícil de afrontar y, a menudo, lloré mientras intentaba terminar la canción y grabarla. Sin embargo, la buena noticia es que, cada día, Awake está haciendo realidad mis sueños. Creo que este álbum tiene muchos momentos con los que la gente puede identificarse. En mis shows en vivo, hablo e interactúo mucho con la audiencia porque quiero que sientan mi pasión por la música y compartir mis historias con ellos.
La canción está llena de nostalgia y reflexión. ¿Qué emociones surgen cuando la interpretas en vivo y cómo mantienes una conexión genuina con la canción, dado lo personal que es para ti?
Cuando toco Remember Me en vivo, sigue teniendo un efecto muy poderoso y emocional en mí. De hecho, hay momentos en los que, si miro las imágenes del video en el momento equivocado, puedo tener un instante de debilidad: he derramado lágrimas y, en algunas ocasiones, ha sido difícil cantar ciertos versos en el pasado.
Al pasar del heavy metal a un sonido más pop-rock con CUTTING CREW, ¿Hubo momentos en los que sentiste que tu identidad musical estaba en riesgo, o simplemente dejaste que tu creatividad te guiara en nuevas direcciones?
En realidad, pasaron diez años entre MAIDEN y CUTTING CREW, y en ese tiempo toqué con muchas bandas diferentes, incluyendo a Brian James (RIP), quien formó un grupo después de dejar THE DAMNED. Fui tecladista en su banda TANZ DER YOUTH. También toqué teclados en la banda de rock progresivo ENGLAND durante algunos años y formé mi propio grupo, RADIO JAVA, con el que grabamos un álbum en Abbey Road (con un sonido más pop y comercial). Así que, cuando me uní a CUTTING CREW, no sentí que estuviera comprometiendo mi identidad musical. Pero tienes razón, siempre sigo mi corazón en todo lo que hago.
Siempre experimentaste con cosas nuevas ¿Cómo hacés para no perder tu identidad?
En el corazón de todo lo que hago, la autenticidad es fundamental. Cuando eliminas todo lo demás, lo único que queda es ser auténtico. Pero también amo la tecnología, y tengo un lado “nerd” que me impulsa a experimentar y probar cosas nuevas constantemente.
A lo largo de tu carrera, has presenciado grandes cambios en la industria musical. En tu opinión, ¿Cómo ha evolucionado el concepto de “éxito” en la música desde los años 70 hasta hoy, y qué significa para vos el éxito ahora?
Creo que hay dos tipos de éxito: el percibido y el sentido. El primero se mide en ventas de álbumes, reproducciones, entradas vendidas y cobertura mediática. Pero el verdadero éxito, para mí, es el segundo: poder hacer lo que amas. Aunque “AWAKE” aún no haya alcanzado el reconocimiento mundial, considero que soy exitoso porque sigo haciendo música, girando y disfrutando cada día de lo que hago.