Icarus Music (bajo licencia de Napalm Records)
Los hermanos Cavalera nos ofrecen la tercera entrega de su proyecto. Tengo que ser sincero de entrada, no es un proyecto que me haya seducido mucho. No obstante su primer trabajo tenía cierto atractivo y me mostró algo diferente a lo que venía haciendo Max desde su partida de Sepultura (Banda que me gustó muchísimo hasta el Roots) alimentando la esperanza de que algo similar a ella podría aparecer. Pero su segundo lanzamiento, Blunt Force Trauma prácticamente hizo que toda esa fantasía se desvaneciera en el aire inmediatamente.
Hoy, Pandemonium, es un álbum que a primera oída no me gustó en absoluto, pero luego de 3 o 4 oportunidades me dejó disfrutar algunas cosas y volver a abrir una esperanza para el futuro. En líneas generales, la placa tiene temas bien pesados, densos y rápidos como por ejemplo Not loosing the edge que es un fiel representante, a su vez, de los más Groove que han hecho desde su comienzo. A medida que analizamos el disco, diría que los Cavalera han vuelto a retomar la idea de incluir ritmos y sonidos étnicos de su Brasil natal lo cual, inevitablemente, nos lleva a comparar ciertos temas como Cramunhao, uno de los mejores del disco, con aquellas gloriosas composiciones de Roots. Por su parte, composiciones como Bonzai Kamikaze tienen cierto aire de reminiscencia a Arise (que quede claro, solo una reminiscencia eh!).
Sí, ya lo sé, no sé si tiene mucho sentido comparar a Cavalera Conspiracy con Sepultura, pero me resulta prácticamente inevitable dada la circunstancia de tener a sus miembros fundadores detrás de las composiciones de este nuevo proyecto. Por otro lado, la idea de la comparación no es destructiva, sino lo contrario. No lo hago para decir “Lo de Sepultura era mucho mejor, no escuchen esto” sino para que aquellos que conocen Sepultura, puedan tener una idea del sonido de este disco y quizás digan “Ah, quizás está bueno” y se animen a escucharlo. Scum y I, barbarian son otros dos temas muy destacables de la placa.
La labor de Iggor es simplemente magnífica y la impronta de Max en las voces le da mucha fuerza y personalidad al disco. Si bien los riffs son bien thrasheros y agresivos, la labor de las violas no me sorprende; al contrario, creo que se podrían haber hecho muchas más cosas, o al menos, diferentes, para llenar un poco más en cuanto a armonías y melodías. La producción general siento que quedó un poco corta, aunque quizás haya sido a propósito en pos de un sonido más crudo o más alto. La otra contra que le encuentro al trabajo es que, en mi opinión, resulta un poco largo y se torna un tanto difícil de terminar de escuchar.
Es un buen trabajo, muy superior al anterior, que si bien no es de aquellas cosas que más me gusta escuchar, al menos me trae un material de los Cavalera que se acerca más a lo que yo tengo asociado a ellos. Por supuesto que para los seguidores de la banda ha de ser el mejor disco hasta la fecha y un buen punto de partida para quienes nunca los han escuchado. Por suerte han desaparecido muchas de esas cosas propias del Nu metal a las cuales Max se había hecho medio adicto. A partir de todos esto, cada uno sabrá qué hacer. ¡Que lo disfruten!
PD: no se dejen llevar por la portada… creo que es una de las peores que he visto en mis más de 25 años como seguidor del metal. Sinceramente, nunca voy a entender como es que se decide avanzar en la edición de un trabajo con estas portadas, pero bueno, sobre gustos no hay nada escrito dicen.
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