SADUS “The Shadow Inside”

Diecisiete años han pasado del último álbum de los californianos: “Out for blood”, y teniendo un gran legado con los bangers de siempre y el nuevo público emergente con sus clásicos “Illusions” (1988) y “Swallowed in black” (1990) tenemos el gusto de disfrutar su nuevo trabajo de estudio. Primer álbum como dúo con sus dos más antiguos miembros aún de pie: Jon Allen en batería y Darren Travis en guitarra y voces, y esta vez Travis haciendo también el trabajo de Steve DiGiorgio en el bajo, quien se distanció de la banda en su última gira y actualmente forma parte de TESTAMENT a modo de miembro oficial, y sigue con la gira del “Death to all”.

Nunca es fácil volver a escuchar una banda de tal antigüedad, sonido sucio y ver de qué manera se han acomodado al sonido actual. Diecisiete años no es poco. Sonido completamente familiar, que, si se quiere, uno se puede preguntar ¿De dónde conozco esto sin conocerlo? El sonido de “Dark roots of earth” de TESTAMENT el sonido de HATRIOT, la excelentísima banda que fue fundada y liderada por Zetro Souza y que actualmente sigue su hijo. Estamos hablando del ingeniero Juan Urteaga, también exmiembro y fundador de VILE. Urteaga viene hace más de dos décadas trabajando como ingeniero con brutalísimos logros en sonido, y aquí contamos con él en este regreso de SADUS llamado “The Shadow Inside”.

Abren con una patada al pecho de casi siete minutos “First blood” excelente título también para abrir un álbum. Rápido, furioso y muy bien arreglado. Aunque la banda se describe como técnica no es algo que agobie, y conservan bastante bien la esencia de sus dos primeros clásicos, ya dicho anteriormente muy bien ajustados al sonido de esta era. Solos cortos, y vocalizaciones similares a su época inicial, esto provoca que todo sea familiar, y no nos abochornen tanto con tendencias actuales, que al antiguo público aún no terminan de convencer.

La obra tiene bombos brutales, Allen no ha perdido absolutamente nada en su estilo y Travis tampoco. SADUS sigue completamente similar de violento y thrash como lo fue siempre, con el toque ya mencionado de Urteaga. Las voces de Travis a sus 56 años de edad siguen increíblemente desgarradoras, ese estilo Schuldiner que SADUS siempre mantuvo en las voces es apasionante. Los riffs de guitarra son frescos y han sabido muy bien no decaer con la ausencia de DiGiorgio. Todo lo contrario, SADUS como dúo aprueba 100%.

El disco no decae en ningún momento, sumamente violento, pasajes machacantes bien thrashers de la vieja escuela, lo cual actualmente se les mezcla con lo groovero y es lo que hace que las bandas no sean puras en lo que hacen, sino más bien una tendencia actual. Otro de los factores por los cuales marca la diferencia quien les saca el sonido actual.

El arte conserva ese dejo de “Swallowed in black” lo que hace también en primera instancia que uno quiera escuchar el disco. Hasta afirmaríamos que es la misma calavera fantasmal en otro ángulo y actualidad.

En esta obra también contamos con dos invitados, el mismo Juan Urteaga quien los grabó y fue su ingeniero en sonido en las voces en el tema “Anarchy” y también con el guitarrista Claudeous Creamer, quien forma parte de estos últimos años junto a Jeff en las líneas de POSSESSED y quien grabo su último álbum de estudio “Revelations of oblivion”. Todo queda entre californianos muchachos.

¿La batalla thrasher USA/Alemania sigue vigente? Creeríamos que sí, y acá SADUS supera perfectamente los repetitivos discos de DESTRUCTION o KREATOR. Quizás a veces sea necesario tomarse un tiempo, aunque también sabemos que estas dos últimas grandes bandas viven de la música, los contratos discográficos y las giras, y esto quizás haga la poca calidad o ingenio para sus nuevos y últimos discos.

Acá no se pueden describir temas, ni elegir “los mejores”, porque simplemente es un disco que te lleva completo de comienzo a fin, como quizás hacía tiempo no aparecía. Completamente recomendable para amantes de los últimos trabajos de TESTAMENT o HATRIOT, pero con esa violencia, agresividad y con ese desgarro en la voz que solo SADUS maneja.

Si te gusta el thrash metal con velocidad, agresividad, doble bombo aplastante en diferentes cambios de tiempo, el ataque de la guitarra y las voces arriba más que seguro que este es un disco para vos.