Ya hace un tiempo que Atoma vio la luz, pero no había tenido el tiempo para sentarme a escribir al respecto. ¿Pero más vale tarde que nunca no?
En un principio Atoma me había parecido un disco raro y no estaba muy contento; pero con las sucesivas oídas esto cambió. Atoma es un pedazo de disco!
DARK TRANQUILLITY es igual a un buen vino. Si uno consume la botella inmediatamente, se disfruta, el vino es fuerte, se siente la crudeza y el sabor final es amargo pero atractivo. Sin embargo, al añejar la botella, el vino cambia su crudeza por cuerpo, su color se oscurece, las sutilezas se vuelven más palpables, el sabor mantiene su amargura, pero se torna más afable y se realzan ciertas notas dulces y el conjunto se vuelve más armónico. Lo mismo ocurre con la trayectoria de esta banda.
DT ha sabido evolucionar su sonido disco a disco, sin dejar de lado la crudeza y la agresividad de sus comienzos, agregando nuevos elementos y experimentando cuando hubo que hacerlo para expandir un poco más las fronteras de su música. En este sentido, Atoma constituye el balance perfecto entre pasado y presente y su magia radica en el hecho de que a pesar de sonar conocido y de contener todos los elementos propios de DT también destaca individualmente y no repite en absoluto nada de lo anterior. La intro “Encircled” muestra el clásico sonido de la banda y cumple a la perfección el rol otorgado abriendo camino a la canción que da nombre al disco. “Atoma” es una composición soberbia que nos tira en la cara toda la faceta más gótica del sonido de DT y destaca por la línea vocal de Stanne que evoca, sin lugar a dudas, al magnífico y cuestionado Projector. Continúa la lista el tema para el cual grabaron el video, “Forward Momentum”, con ciertos toques industriales y una atmósfera bastante oscura brindándonos un tema que tranquilamente podría haber formado parte de Fiction. De aquí en adelante el disco va abriéndose paso en nuestra mente y se va metiendo poco a poco, oída tras oída, sutilmente hasta quedar enquistado pidiéndonos que lo volvamos a poner. “Neutrality”, “Force at hand” que no sé si es por su mid tempo o la naturaleza de sus riffs, pero me recuerda muchísimo a AMON AMARTH, la depresiva, pero bellísima “Faithless by default” y el primer corte de difusión “The Pitiless” mostrando uno de los mejores riffs del disco, forman el núcleo más duro del trabajo. Mostrando todas las facetas de DT desde sus comienzos hasta hoy, desde la voz limpia más dulce hasta el gruñido más áspero, todo con una calidad superlativa y una producción más que impecable. Acercándose al final “When the world Screams” es un último golpe contundente en la nuca con unos riffs sobresalientes y una vibra general muy positiva. El resto de los temas no digo que son de relleno, pero no se destacan por sobre los ya mencionados. Complementan y dan cuerpo a esta terrible obra de arte que sacaron los suecos.
Y sin menospreciar al resto de la banda, es Stanne quien destaca por sobre todas las cosas. Su rango vocal, su pasión en lo que hace, la calidad de sus letras, y su profesionalismo lo han convertido en el vocalista más destacable de la escena y uno de los mejores frontmans del momento (quien haya visto a DT en vivo sabe de lo que hablo). DARK TRANQUILLITY nos muestra hoy con Atoma, una banda madura, consolidada, sólida y convencida de lo que hace, sin temor a experimentar y equivocarse. Uno de los mejores lanzamientos de este año sin lugar a duda y lo mejor que han sacado desde Fiction. Descorchen ese vino que tienen ahí guardado, relájense y disfruten del sabor de lo añejado mientras este disco gira en vuestros equipos.
4 Nov 2016 – Century Media Records
Texto: Estanislao Aimar
Agradecemos a Century Media por la facilitación del material.
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